El virus del papiloma humano (VPH) es el nombre de un grupo de virus que infecta y daña las células del revestimiento de la boca, la garganta, los genitales y otras partes del cuerpo. Estos lugares donde se contrae el VPH se denominan “zonas genitales” porque las personas que los padecen suelen mantener sus sentimientos sexuales hacia otras personas cerca de su corazón. Las zonas genitales también incluyen algunos lugares donde otras personas (como su pareja o sus padres) pueden verle. Si tiene alguno de los tipos de VPH en la zona genital, puede tener infecciones persistentes o recurrentes que provoquen inflamación e irritación. Esta inflamación e irritación puede causar cicatrices permanentes en ciertos lugares como los genitales, el ano o la garganta. Esta afección se denomina “infección por VPH” y es algo que se puede prevenir practicando sexo seguro, es decir, no manteniendo relaciones sexuales con alguien que tenga algún tipo de VPH en la zona genital. No es necesario ser virgen para contraer este virus; hay casos en los que una persona infectada vuelve a tener un comportamiento sexualmente activo después de haberse curado de una infección. Pero si ya te has curado, es mejor que no vuelvas a ese estilo de vida aunque creas que tiene sentido desde un punto de vista egoísta. Deberías seguir leyendo para obtener más información sobre cómo este virus se abre paso en tu vida y cómo el hecho de no contagiarse puede provocar verdaderos cambios en tu vida.
¿Qué es el virus del papiloma humano?
El virus del papiloma humano (VPH) es el tipo más común de VPH. Aproximadamente el 70% de las mujeres se infectarán con uno de los tipos de VPH en algún momento de su vida. Se calcula que alrededor del 90% de las infectadas no experimentan síntomas. Otros tipos de VPH pueden causar una amplia gama de enfermedades, desde verrugas y cánceres hasta trastornos del desarrollo y complicaciones del embarazo. Estas enfermedades se denominan “tipos de VPH” porque están causadas por diferentes tipos del virus. Hay muchos tipos diferentes de virus del papiloma humano. Los tipos que causan más problemas son los tipos 6, 11, 14 y 18. Estos se denominan colectivamente tipos “grandes” o “de alto riesgo”, aunque hay muchos otros términos que pueden referirse a estos tipos. Las personas con un tipo desconocido de VPH se denominan a veces “factor de riesgo” para desarrollar ciertos tipos de enfermedades. El tipo 6 es el más común y es el que causa la gran mayoría de las infecciones por el virus del papiloma humano. También es el tipo que se detecta con más frecuencia en las pruebas de detección del cáncer de cuello de útero.
Otros tipos también pueden causar cáncer de cuello de útero, pero el tipo 6 es el más común. El tipo 18 es el menos común, y es el que suele asociarse a infecciones en personas jóvenes, sexualmente activas y que no siguen ningún tipo de tratamiento preventivo. La sabiduría convencional sostiene que las infecciones por VPH desaparecen del cuerpo por sí solas después de un período de tiempo, pero hay pruebas que sugieren que los efectos a largo plazo de las infecciones tempranas pueden ser permanentes. También es importante recordar que no todos los tipos de VPH son perjudiciales, y algunos son útiles.
¿Qué causa las infecciones por VPH?
Hay muchos factores diferentes que pueden causar una infección por VPH. Se pueden dividir en cuatro categorías: condiciones preexistentes, entorno, relaciones y médico.
- Condiciones preexistentes – Condiciones que ya están presentes pero que no están necesariamente diagnosticadas o tratadas, como trastornos genéticos, enfermedades relacionadas con órganos y enfermedades metabólicas.
- Factores ambientales – Cosas como infecciones causadas por otros virus, bacterias o parásitos.
- Factores sociales – Las personalidades, los estados de ánimo y las interacciones de las personas también pueden afectar a cuándo y con qué frecuencia se deben mantener relaciones sexuales.
- Médicos – De nuevo, esto puede dividirse en cuatro categorías. La primera son las infecciones que probablemente se deban a enfermedades como la sífilis, la gonorrea y la clamidia. La segunda son las infecciones causadas por medicamentos u otras toxinas. La última son las infecciones debidas a enfermedades que actualmente no tienen tratamiento.
Los tipos más comunes de VPH
Hay muchos tipos diferentes de VPH, y es importante saber qué tipos se tienen para poder recibir el tratamiento adecuado.
- Tipo 6: Es el tipo más común y el responsable de la mayoría de las infecciones. Suele detectarse en adolescentes y adultos jóvenes.
- Tipo 11: Es el más raro y suele detectarse en personas mayores. Suele encontrarse en personas asintomáticas y se le ha llamado “el gran asesino silencioso”.
- Tipo 16: Es el último tipo que se ha descubierto y es responsable de alrededor del 6% de todas las infecciones.
- Tipo 18: También se denomina “tipo cáncer” y es responsable de alrededor del 1% de todas las infecciones. El tipo 18 es el más agresivo y puede ser muy difícil de tratar.
Tipos de infección por VPH y el sistema reproductor femenino
Hay muchas maneras diferentes de pensar en los tipos de infección por VPH y el sistema reproductor femenino. Las infecciones genitales por VPH están causadas por los tipos de VPH que se encuentran en la zona genital. Estas infecciones no atraviesan el sistema reproductor femenino habitual, pero aun así pueden causar problemas en el aparato reproductor femenino. Un tipo de inflamación llamado “endocervicismo inflamatorio” es una de las principales causas de las hemorragias uterinas anormales en las mujeres. Otros tipos de endocervicitinismo también pueden causar irregularidades menstruales, como retrasos o ausencias en el ciclo mensual. También hay informes de que la infección por el VPH provoca una pubertad precoz y cambios en la orientación sexual y la identidad de género de los niños. Esto todavía no se conoce bien.
Cómo saber si tiene herpes genital o una infección por VPH
Puede saber si tiene un herpes genital o una infección por VPH mirándose al espejo y viendo si tiene la típica piel roja y llena de bultos alrededor de la boca y las zonas genitales. Si es así, tiene ambas infecciones. Sin embargo, si tiene llagas en la boca o verrugas anogenitales, tiene una de las infecciones mencionadas anteriormente, pero no la otra. Para confirmar qué tipo de VPH tiene, se puede realizar una prueba denominada “anticuerpo fluorescente”. Esta prueba incluye un antígeno (VPH) y un anticuerpo fluorescente, que se utiliza para detectar la infección. Esta prueba se utiliza para diagnosticar y tratar las infecciones causadas por estos tipos de VPH.
Enfermedades de transmisión sexual (ETS) y cómo evitarlas
Tener una ETS ya es malo, pero tener una de transmisión sexual, como la gonorrea o la clamidia, puede ser aún más difícil. Tienes que tomar precauciones especiales para protegerte de estas enfermedades. Hay muchas medidas que puedes tomar para reducir el riesgo de infección, pero mantener relaciones sexuales seguras es siempre la mejor manera de hacerlo. Lo primero y más importante es practicar el sexo seguro. Esto significa utilizar un preservativo cada vez que tengas relaciones sexuales, incluso si no tienes una relación. Un estudio descubrió que las personas que utilizaban preservativos de forma sistemática tenían un 50% menos de probabilidades de contraer ETS que las que sólo practicaban sexo oral o anal. Otro consejo es hacerse pruebas de ETS con regularidad. Esto es especialmente importante para los jóvenes, ya que son más propensos a infectarse y, por tanto, a contagiar a otros.
Conclusión
El virus del papiloma humano (VPH) es una enfermedad de transmisión sexual común que puede transmitirse de persona a persona a través de las relaciones sexuales. Los tipos de VPH que causan la mayoría de los casos de VPH genital son también los tipos más frecuentes entre las mujeres. Es importante conocer su tipo de VPH y cómo protegerse de la infección.