Las piscinas portátiles o piscinas desmontables se están volviendo algo cada vez más común, esto se debe a distintas razones, pero principalmente a su practicidad. Si quieres pasar un día de piscina con tu pareja o tu familia, estas son la mejor opción. No vas a necesitar hacer obras ni gastar demasiado dinero, ya que estas piscinas suelen costar unos cuantos euros.
Adicionalmente, no van a ocupar demasiado espacio y puedes desmontarlas una vez hayas terminado de utilizarlas. A continuación, te hablaré un poco más sobre ellas y te diré como elegir la adecuada.
¿Qué es una piscina portátil?
Las piscinas portátiles utilizan cascos prefabricados que son rápidos y fáciles de instalar en tu jardín. Cuando veas las piscinas portátiles que están a la venta, te dará cuenta de que están disponibles en una gran variedad de formas y colores. Esto le permite adaptar tu compra al tamaño y la forma de tu jardín con una dificultad mínima. Las piscinas portátiles también eliminan la necesidad de una construcción larga y costosa. Además, no tendrás que preocuparte de disponer de mucho espacio adicional en su jardín para que la empresa las instale.
Todo esto significa que puedes comprar tu nueva piscina portátil de forma relativamente barata, sea cual sea tu presupuesto. Las piscinas portátiles son muy populares entre las familias pequeñas, las parejas y las personas solteras que quieren una piscina pero no quieren gastar miles de euros para conseguirla.
¿Cómo elegir un tipo de piscina portátil?
Una de las primeras cosas en las que debes fijarse cuando busques piscinas portátiles en venta es el tipo. Hay cinco tipos principales que puedes considerar, y elegir el correcto para tus necesidades y el espacio, te ayudará a obtener el máximo provecho de ella. A continuación te los detallamos.
1. Piscina de inmersión portátil
Una piscina de inmersión portátil es mucho más corta y estrecha que una piscina tradicional, pero es más profunda. Puede tener un cuerpo de fibra de vidrio, que es muy duradero. La fibra de vidrio también es resistente a las bacterias y las algas, lo que reduce el tiempo de limpieza. La fibra de vidrio está hecha para durar toda la vida con un mantenimiento mínimo, por lo que se encuentra en el extremo superior de los precios de las piscinas portátiles. Sin embargo, el mayor coste inicial se amortiza con el tiempo.
2. Piscina de contenedor
Una piscina de contenedor es una opción muy popular en toda porque se puede colocar en una amplia gama de espacios. Tiene un exterior de contenedor con un inserto de piscina de fibra de vidrio. Este tipo de piscinas portátiles tiene un diseño estrecho que es ideal para hacer largos. Además, todo lo que necesitas es una zona plana, como una losa de hormigón, para colocarla. La enchufas, la llenas y ya está lista para usar.
3. Piscina pequeña
Estas piscinas portátiles vienen en dos formas, y encajan perfectamente en muchos patios traseros que no tienen mucho espacio. Estas son el tipo de piscina para familias pequeñas, ya que no requieren de demasiado espacio para poder instalarla, además, son sumamente sencillas.
También es uno de los modelos más económicos, por lo cual, si no cuentas con una gran presupuesto, esta debe ser tu opción.
4. Piscina con revestimiento de vinilo
Otro tipo de piscinas portátiles en venta es la de revestimiento de vinilo. Es una de las opciones más baratas que existen para las piscinas portátiles. Tendrás una estructura metálica para soportar la piscina en sí y hacerla estable. Hay una base de resina que se forra con el liner de vinilo antes de llenar la piscina para su uso. Puede elegir entre diferentes diseños, formas y tamaños. Sin embargo, tendrás que reemplazar el liner de vinilo cada cinco o siete años porque se romperá con el tiempo.
5. Piscina de plástico
Posiblemente la opción más barata de la lista, una piscina de plástico es algo que mucha gente considera porque es rápido y conveniente. Estas piscinas vienen en tamaños y formas que permiten que tanto los adultos como los niños las disfruten. Sin embargo, son muy propensas a sufrir daños. Es fácil hacer un agujero en el lateral o en el fondo que luego habrá que parchear. La ventaja es que son fáciles de desmontar y llevar.